Paralelepípedo de 40 metros de altura, se sitúa sobre un cuerpo de agua, frente al Lez, dominando una explanada de 120 metros al norte. Los arquitectos Jean Nouvel y François Fontès querían que fuera abierto y transparente, vaciado verticalmente por dos patios y perforado horizontalmente por huecos que dan vistas al parque, la plaza y el Lez. Un edificio sostenible y contemporáneo, el nuevo ayuntamiento alberga una planta de energía fotovoltaica de 1.400 m2, una de las más grandes de Francia. Los paneles fotovoltaicos se instalan en la cubierta del edificio, pero también se integran en los parasoles que protegen las fachadas. la estructura de acero está revestida de aluminio y fachadas de vidrio, revelando un tono de azul. Cada uno de ellos es tratado de forma específica por los protectores solares.